Cuidado y reparación
Nuestros cuchillos están diseñados para resistir un uso extensivo con el tiempo. Sin embargo, incluso las herramientas más finas requieren un mantenimiento adecuado y cuidado para garantizar su longevidad. A continuación, te guiaremos a través de los pasos esenciales para mantener tu cuchillo en óptimas condiciones, listo para cualquier tarea que le presentes.
Instrucciones para el afilado diario
Paso 1
Comienza afilando la hoja con movimientos circulares suaves. Es importante mantener el ángulo fijo al ángulo original de la hoja y continuar hasta que se formen rebabas en el borde opuesto.
Repite el procedimiento en el otro lado hasta que sientas la rebaba en el primer lado. Ahora has establecido un borde recto.
Utiliza una herramienta de diamante de grano fino, acero o piedra. Cuando estés en el campo, te recomendamos llevar una herramienta de afilado de diamante por si necesitas afilar tu cuchillo. En casa, puedes usar tu herramienta de afilado preferida.
Paso 2
Finaliza el afilado eliminando la pequeña cantidad de rebaba restante. Trabaja a lo largo de toda la longitud de la hoja, tirando suavemente de la herramienta hacia ti, con un ángulo más pronunciado que el afilado inicial. Continúa trabajando a lo largo de toda la longitud de la hoja.
Paso 3
Para verificar que la hoja esté afilada, raspa suavemente el filo sobre tu uña. Deberías sentir de inmediato si el cuchillo está afilado o no. Si lo haces con cuidado, esta es una forma confiable y bastante segura de probar la nitidez de tu cuchillo.
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